El taller es responsable de los residuos que genera y posee y, como tal, debe darles una gestión adecuada (Ley básica de residuos, 10/98 de 21 de abril).
Tenemos que tener claro cuáles son las obligaciones del taller en el tema de residuos peligrosos y no peligrosos, un tema muy importante si queremos ser una empresa que preserva el medioambiente y cumple con la Ley dado el aumento de inspecciones por parte de la Administración.
Nuestras obligaciones serían:
- Evitar la eliminación de residuos reciclables o con valor.
- Mantenerlos en condiciones de seguridad e higiene, desde el momento de su producción hasta su cesión a la persona adecuada.
- Entregarlos a un gestor de residuos, para su valorización o eliminación.
- Hacernos cargo de los gastos que origine la gestión de residuos.
Además de todo esto es obligatorio cumplir una serie de trámites administrativos ante el organismo medioambiental competente de cada comunidad autónoma. Pincha aquí para ver cuáles son los trámites administrativos.
El taller deberá contactar con un gestor autorizado y solicitarle el documento de aceptación para cada residuo. El gestor retirará del taller los residuos y le entregará el justificante de entrega que acredita los residuos que se va a llevar. Esto es imprescindible si se quiere tener pruebas de que estamos cumpliendo con la legislación vigente.
¿Cómo debemos actuar internamente con los residuos que son peligrosos?
- Lo primero que tendremos que hacer será separar de forma adecuada y no mezclar los residuos peligrosos.
- Debemos estar seguros que los envases y sus cierres están construidos con materiales resistentes al contenido y que no reaccione con el contenido interior. Por supuesto, el envase no debe contener grietas o estar defectuoso.
- Muy importante: el etiquetado debe ser claro, legible e indeleble. La etiqueta debe contener el código de identificación del residuo, indicar los riesgos que presentan los residuos, el nombre, dirección y teléfono del titular del residuo y la fecha de envasado (como mínimo la etiqueta tiene que ser de 10 x 10 cm).
- Debemos tener una zona exclusiva para almacenar los residuos peligrosos en nuestro taller. El almacenamiento de esta clase de residuos no puede superar los 6 meses salvo autorización del órgano competente.
Es muy importante que tengamos en cuenta todo lo expuesto porqué además de contribuir con la preservación del medioambiente también podemos generar confianza en nuestros clientes.
Vamos a ponernos por un momento en el lugar del cliente haciéndonos las siguientes preguntas:
- ¿Me daría más confianza el dejar mi vehículo a reparar en un taller que cumple con la legislación vigente y cuida el medioambiente?
- ¿Estaría más tranquilo como cliente si el taller realiza los trámites necesarios para gestionar adecuadamente los residuos peligrosos que genera mi vehículo?
¡POR SUPUESTO QUE SÍ! La imagen de nuestra empresa se verá fortalecida. Nos considerarán una empresa actual, seria, eficiente, con profesionalidad.
Así pues, analicemos nuestra situación personal y verifiquemos que estamos haciendo las cosas bien. Esto, aunque no lo creamos, puede producir beneficios en el futuro de nuestro taller.
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